martes, 31 de marzo de 2020

El Eterno Domingo...




Para mí el confinamiento empezó un Domingo, el Sábado habló el presidente y nos dijo que teníamos que quedarnos en casa, en principio dos semanas.

Las primeras preocupaciones aparecen; tener víveres para llevar las dos semanas de la mejor forma que se pueda, estar todos bien y juntos en casa. Nuestra primera reacción es un miedo atroz a no tener las cosas primordiales bajo control.

Sinceramente creo que todos compramos mucho papel higiénico porque en esos momentos eso y poco más es lo que podíamos controlar, los seres humanos buscamos el control de la situación y ya que no podemos controlar al cov-19, si podemos controlar nuestras provisiones y a tener a nuestros seres queridos en casa. Cuando ya tienes lo que crees que controlas bajo control te relajas y respiras.

Luego sientes que el problema está fuera y no dentro de casa, pero hay que salir a trabajar, los primeros días tres miembros de la familia, llegan los desinfectas de arriba abajo y solicitas al Universo o a Dios (cada quien en quien cree) que no tenga el virus encima y lo reparta por la casa.

Respiras cada día que pasa y no se ha enfermado nadie, finalmente salen dos a trabajar, y luego una persona… la economía es otro tema de preocupación.

Escribimos diariamente o hacemos vídeo llamadas a nuestros seres queridos para comprobar que estén bien y nos alegramos tanto cuando todos lo están.

El gobierno amplia la estancia en casa, dos semanas más, supuesta mente 11 de Abril, pero los casos siguen sumando y mientras sumen todos sabemos que esto se va a prolongar más allá de esa fecha.

Por el otro lado están todos los que se toman esto como una broma, y salen y salen y vuelven a salir… Nos ponen en peligro a todos, y a los que nos tomamos el confinamiento en serio (nos confinan durante más tiempo en casa)… no voy a darles protagonismo, creo que todo lo que siembras tarde o temprano lo recogerás.

Lo que sí quiero es agradecer a todos las personas que se quedan en casa, que aman a los suyos, a la vida, a la humanidad y al planeta entero.
Quiero agradecer a todos los que salen diariamente a trabajar, a ayudar a quien lo necesita,  y a velar por nosotros, da igual el oficio que sea…si estás en la calle estas arriesgándote por mí.
Y a todos esos héroes que ni siquiera se sienten héroes, pero siempre lo han sido, lo que pasa es que ahora es cuando la mayoría de la población se ha dado cuenta.

Siempre he pensado que somos tontos, porque los médicos, enfermeros, etc que tienen nuestra vida en sus manos, los maestros y profesores que educan nuestro hijos, la policía y fuerzas armadas deberían cobrar más que un futbolista que solo corre detrás de una pelota. Nunca es tarde para cambiar esto.

Nunca es tarde para rendirle homenaje a los que realmente se lo merecen a esas personas que dedican su vida a la humanidad, a esos que en estos momentos son incansables y hacen que por respeto a ellos me quede en casa, no quiero darles más trabajo.

Si alguien ha leído hasta aquí, también te lo agradezco.

Todos somos parte de este Planeta y somos responsables de está lucha contra el cov-19.

Gracias, Gracias, Gracias,

Mignon

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