Cada uno de nosotros en estos días sentimos soledad, a veces
es porque la necesitamos y otras veces no. No es lo mismo la soledad que
encontrarse confinado solo, hay personas que estando solas no sienten soledad,
y otras que sí.
Esa soledad puede ser de varias formas:
Puede ser una soledad que nosotros buscamos y disfrutamos
con cosas que nos gustan hacer, hobbies o para estar con nosotros mismos, hay
muchas personas que están acostumbrados a ella, o necesitan esa soledad un rato
diario para sentirse bien con el mundo y con ella misma.
Otras veces no, estar rodeado de personas no necesariamente
tiene que significar que no nos podemos sentir solos. Este tipo de soledad es
que la que más me preocupa y es de la que me gustaría escribir.
Para todas esas personas que sienten esa soledad, les
recomiendo que la utilicen para llenar su vida de momentos para ellos.
Sé puede llenar de música, de literatura, de cine, o incluso
para los más espirituales de meditaciones, mantras, plegarias o para aprovechar
y conocerse a sí mismo.
Esa soledad puede servir a un fin mayor para los más
espirituales y ayudarlos a despertar a este nuevo Mundo al que vamos a salir
tarde o temprano.
Quizás esta soledad por parte infringida es la mejor forma
de despertar y salir de casa como un nuevo Ser que aprovecho sus ratos de
soledad para RENACER de nuevo.
Estos momentos que nos ofrece Madre Tierra son unos momentos
de aprendizaje y de auto-conocimiento, se puede aprovechar de muchas maneras y
se deben de aprovechar.
Todos necesitamos estar con nosotros mismos y enfrentarnos a
la persona que somos, lo que te gusta de ti mismo apláudelo, y lo que no,
trabájalo para cambiarlo.
Un maravilloso método que funciona es el espejo, lo
recomiendo. Háblate, mírate a los ojos y verás todo lo que sale de ti. Hazlo
varios días, empieza con poco tiempo y vete ampliando, mirarte a los ojos te
llevará a tu Alma y ella te hablará.
Saca fuera lo que llevas dentro, amate.
Gracias, Gracias, Gracias.
Mignon
No hay comentarios:
Publicar un comentario